CAMBIO GLOBAL Nuestra región tiene a la explotación agrícola y agroalimentaria dentro de sus principales industrias, la cual está en situación en extremo compleja debido a la escasez del agua para riego y cultivo. El resultado es que grandes embalses ahora estén en sus mínimos y gran parte de los embalses menores estén secos, así también los pozos registran sus niveles estáticos de agua disponible cada vez a una mayor profundidad. Se estima que esta escasez de agua no esta causada principalmente por una sobrexplotación o cambio a cultivos más demandantes de agua o de riego con menor recarga de suelos, que son factores que influyen pero no son los considerados como determinantes, sino que se estima es un asunto netamente meteorológico y climático. El propósito de este proyecto es contribuir en el desarrollo y aplicación de técnicas que permitan elevar la recarga de los acuíferos y sustenten su competitividad en toda la región, incluyendo modelamiento de soluciones, incluyendo aspectos de gestión hídrica y colaborando y complementando con asociaciones gremiales agrícolas y otros del área de gestión del agua. El proyecto en concreto busca determinar estrategias para la generación de sistemas infiltrantes que permitan una mayor captura de agua lluvia para ser almacenadas mediante infiltración en las napas freáticas, que son espacios de almacenamiento protegidos, de alta calidad, bajas pérdidas y para los que ya existen instalaciones y maquinarias de pozos y bombas para su explotación. Para ello las actividades a realizan comienzan por simular las condiciones actuales de aguas lluvias, escurrimientos e infiltración, luego determinar tentativamente ubicación y características de sistemas de infiltración, y finalmente obtener el resultado teórico en la captura adicional del agua por infiltración. Se invita a participar a asociados y relacionados tanto de la agricultura como del manejo del agua en difusión y capacitación de este proyecto y sus alcances, realizando ensayos de campo al construir sistemas de infiltración reales. La región ha mostrado un desarrollo agrícola importante a partir de la década del 90, con un crecimiento sostenido de las plantaciones. El crecimiento se ha visto restringido por el abastecimiento de agua para el riego, en consideración de que se habría pasado por la década más seca que se registre desde el año 1850 y además existe riesgo en la sustentabilidad de la cuenca, en que sus primeros síntomas se manifiestan en el descenso sostenido de los niveles estáticos de los pozos del valle al iniciar las temporadas de riego año en año. Esta disminución del agua, resalta la preocupación por la seguridad del riego y las oportunidades de crecimiento dados por sus factores de producción de esta industria agroalimentaria de la región y plantea la búsqueda de alternativas para el abastecimiento de agua para el riego, el mejoramiento de las eficiencias de aplicación de acuerdo a requerimientos, la búsqueda de alternativas de cultivos y cultivares de menores requerimientos hídricos y el desarrollo de técnicas que apalanquen el desarrollo.
Justificación o Mérito Innovativo La construcción de embalses es costosa, requiere de superficie importante que muchas veces compite con el espacio de cultivo en la superficie y presenta grandes perdidas por evaporación que se verá exacerbada en un contexto de calentamiento por cambio global. El almacenamiento del agua en el subsuelo no quita espacio, es un lugar protegido donde los mismos suelos la filtran y purifican, los microorganismos del suelo la limpian al consumir restos orgánicos y otros, y el recurso se mantiene accesible con las instalaciones de pozos y bombas extractivas ya existentes. Es por esto que el presente proyecto busca aumentar la captura de aguas lluvia y almacenarlas en los subsuelos y tiene como objetivo principal contribuir en el desarrollo y aplicación de técnicas que permitan elevar la recarga del acuífero y sustenten su competitividad a través del aumento del recurso que impacta directamente sobre la población y la agricultura como factor productivo preponderante en la región. Como objetivos secundarios, la actualización de la demanda y recarga por sub-cuenca del valle, diagnósticos de cada una de las sub-cuencas relativos a sus usos y técnicas de riego utilizadas y organización existente, la capacitación demostrativa en manejo de cuencas, la capacitación demostrativa en cosecha de aguas y recarga del acuífero y una propuesta de estructura organizativa del valle que resguarde el uso del recurso hídrico del valle. Son conocidos los esfuerzos de los últimos años por lograr una mayor infiltración a las napas subterráneas buscando una recarga del sistema y el valor agregado de esta propuesta para nuestra comunidad se expresa en que este proyecto nos permite ser más eficientes en estos esfuerzos aumentando la infiltración y recarga, logrando sistematizar el proceso y unificar esfuerzos desde una escala regional hasta las localidades y pequeñas parcelas, desarrollando capacidades y competencias en los agricultores y otros individuos que requieren de manejo de agua y recursos de lluvia. Este acercamiento técnico y científico ya existe en países desarrollados, por ejemplo en Estados Unidos la Agencia de Protección del Ambiente (EPA) tiene variados programas y recursos para promover el almacenamiento de las aguas lluvias en el subsuelo, esto a partir de sistemas de infiltración variados como las trincheras de infiltración (Infiltration Trench, Infiltration Basin) y programas nacionales de elementos infiltrantes. Respecto al empleo, el sector agrícola ha ido aumentando en las últimas décadas en forma directa de empleos permanentes y un aumento en los empleos estacionales. A lo anterior hay que agregar los empleos de actividades relacionadas a la producción, al turismo, empresas de logística, etc.
Territorio que abarca Provincias: Chacabuco, Maipo, Melipilla, Talagante Comunas: El proyecto se centrará en las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Curacaví, Paine, Buin, Talagante, Isla de Maipo y Melipilla a través del establecimiento de predios demostrativos y difusión tecnológica. Luego de la validación de la tecnología, la acción del proyecto se extenderá a las dieciocho comunas rurales de la Región a través de talleres de capacitación a agricultores y funcionarios públicos de nivel comunal, provincial y regional. Para ello se contará con la ayuda de la Asociación de Municipalidades Rurales (AMUR).
Prioridades de la Estrategia Regional de Innovación de la Región Metropolitana La RMS cuenta con 18 comunas rurales, las que cubren cerca del 85% del territorio y donde habitan casi 900.000 personas. La RMS enfrenta una dualidad urbano – rural caracterizada por una relación asimétrica entre los dos sectores. Aún existen localidades rurales en la RMS que en términos de distancia geográfica son relativamente cercanas a las zonas urbanas de mayor desarrollo de Santiago, pero “lejanas” en cuanto a acceso a servicios de educación, salud, comunicaciones y desarrollo productivo. La presión que ejerce el crecimiento de las zonas urbanas sobre las zonas rurales, no sólo impacta en el cambio en el uso del suelo, lo que va disminuyendo progresivamente la superficie de suelo agrícola tipo I y II, sino también en exigencias de mayor producción agropecuaria, competencia por el agua, aumento de la contaminación de los suelos y el aire y menor disponibilidad de mano de obra para labores del campo. El cambio climático, que entre otras características suma un extenso período de sequía, pone en riesgo la sustentabilidad del sector y desafía a los agricultores en la búsqueda de soluciones tecnológicas que disminuyan en consumo de agua de sus cultivos. La escasez de agua si bien se presenta con distintos grados de criticidad dependiendo de la comuna, es un fenómeno que afecta a todas las comunas de la RMS en forma creciente. En comunas de la zona Norte de la RMS como Til Til, Lampa y Colina la sequía es de extrema gravedad. Sin embargo, en comunas que aún no presentan situaciones graves como Paine y Buin, se aprecia una menor disponibilidad de agua, con pozos que requieren cada vez mayor profundidad, lo que augura serios problemas de sustentabilidad de mantenerse la falta de lluvias. Junto al desafío del agua, el sector agropecuario requiere del desarrollo de nuevos productos, mercados, y de aumento de la productividad. Por ello la escaza cooperación y asociatividad de los agricultores es también una debilidad que la ERI identifica como crítica a nivel diagnóstico. El proyecto asume entonces dos componentes de intervención: el diseño y validación de una tecnología específica en relación al aumento de la disponibilidad de agua y la participación activa de asociaciones gremiales en el proceso de transferencia tecnológica y activación de redes de apoyo para la adopción de la solución propuesta. En términos específicos, el proyecto contribuye a los siguientes ejes, programas y medidas:
Eje Estratégico 2: Promover una Sociedad Colaborativa Estableciendo Redes de Cooperaación e Incorporando Actividades Transversales Innovadoras
Eje Estratégico 4: Ampliar la Estrategia Regional de Innovación
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